Fénix 10, 23-111

Sumario indagatoria del Delito de Infidencia, actuado por el Tte. Cnel. Castilla E n el archivo formado por Mariano Felipe Paz Soldán, y que actual- mente constituye uno d e los más importantes fondos de la colección de ma- nuscritos d e la Biblioteca Nacional, se halla el sumario incoado -a consecuen- cia del pronunciamienfo efectuado en Arequipa por un grupo de jefes del Ejército e n la noche del 8 al 9 de agosto de 1829- contra "los reos y cómpli- ces en la pretensión de constituir Presidente de la República Peruana al que lo es de Bolivia, el Gran Mariscal Santa Cruz, y de agregar a la segunda los departamentos de Arequipa, Cuzco y Puno". Además de la cubierta, e1 cuader- no original presenta 89 hojas útiles, cuya numeración acusa dos irregularida- des, a saber: la falta de las hojas signadas con los números 66 a 68; y la in- clusión d e una hoja sin numerar, a continuación de la 87. Aquellas wrres- pondían a los anexos 2? y 3? de una comunicación suscrita por el prefecto de Cuzco, Coronel Juan Angel Bujanda, quien hace saber que ellos son copias de las cartas que había rem'tido a sus anigos de Puno, para incitarlos a con- trarrestar allí cualquier intento sedicioso, y al Coronel Rufino Macedo, para que se redujese al orden determinado por el respeto a las autoridades peruanas. Los jefes y oficiales que aparecen implicados en el sumario fueron sor- presivamente detenidos durante la noche del 8 al 9 d e agmto de 1829, y re- mitidos a Lima; pero, n o obstante la responsabilidad que se les atribuía en el parte que detallaba las circunstqncias determinantes del pronunciamienfo, fueron tratadas con alguna lenidad,par el gobierno, y aún parece que se in- tentó disminuir la significación de los hechos. Ello inspiró una protesta al Teniente Cormel Ramón Castilla, fiscal del sumario, quien juzgaba que así eran alentados los propósifos del Mariscal Santa Cruz intuía por ello que el Presidente de Bolivia también sería a la postre Presidente del Perú, y se veia compelido a ratificar el intenso nacionalismo que guió los actos de su vida, y a mostrar los acentuados tonos de su carácter. Impaciente, y ajeno aún a las su- tilezas de la política, tal vez no se detenía Casfilla a considerar las soluciones prudentes, y aún la conveniencia d e no empujar a los comprometidos hacia la desesperación y la aventura. Tal lenidad no implicaba u n desconocimiento de la vasta conspiración que en los departamentos del sur movían los amigos y agentes de1 Mariscal Santa Cruz, sino el deseo de obstruir el camino a la violen- cia; y, con el ánimo de evitar el desbordamiento de pasiones que el escándalo promueve, el Gran Mariscal Agustín Gamarra, Presidente del Perú, mantenía Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.10, 1954

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