Fénix 9, 278-351

El Perú en la mUsica escénica por JUAN SIXTO PRIETO País de leyenda, pletórico de sugestiones, el Perú, a raíz de la conquista hispana, centraliza la atención europea, cristalizada literariamente en inn.ume- rables trabajos de diversos comentaristas. A los juicios de aquellos que pisan nuestro suelo se añaden los que brotan en la sensibilidad novelesca de lejanos admiradores, fusionando los hechos verídicos con amables utopías sobre la tie- rra desconocida. En lo tocante al carácter musical del presente artículo y refiriéndonos a los siglos XVIII y XIX figuran tres producciones como las bases inspiradoras que utilizan libretistas y compositores para ocuparse del Perú: la tragedia Alcira, de Vslfaire (1); el episodio amoroso entre Cora y Alonso en el poema Los Incas, de Marmontel (2) , y el sainete La Carroza del Sanfo Sacramento, de Merimée (3). Sin el acicate de sus temas, envueltos con el ropaje de la ficción, quizá no sería tan numeroso, en el registro siguiente, el desfile no- .aron su mina1 de autores ilustres o semivaliosos que con sus obras testimon; interés por nuestros asuntos (4). Es obligatorio reconocer que las partituras de óperas y ballets compren- didas en el período indicado y que enumeramos después, no resisten el más leve análisis respecto al empleo de un típico colorido peruano, si consideramos que ( 1 ) .-Francois--Marie Arouet de Voltaire ( 1694-1778).-La primera representación de Alcira, o Los americanos efectuóse en 1736, y con notable retraso, SU estreno limeño en 29-7-1828, interpretada por Teresa Samaniego y Juan Bautista Casanave, y arreglaúa al cas- tellano con el título La Elmira americana, o Los peruanos, versión desnaturalizadora del ori- ginal que cierto entendido, T. S., censuró cn un periódico local. Esta traducción sería la misma que so estrenó en Buenos Aires, en 1831. (Véase Bibliografía consultada.-11: p. 239; 56: Nos. 289 y 300, 29-7 y 11-8-1828, resp.) (2 ) .-Jean-Francois Marrnontel ( 1723-1799) .-En 1778 apareció fa primera edición de Los Incas o La destrucción del Imperio del Perú. (3).-Prosper Merimée (1SG3-1870).-Bajo el seudónimo "Joseph 1'EstrangeW y- blicó en 1825 su volumen Teatro de Clara Gazul, entre cuyas piezas se halla La carroza ael Santo Sacramento, que arreglada al castellano, con el título La calesa de la Perricholi, por Antonio Garland se estrenó en Lima, Teatro Colón, 20-9-1924, interpretada por Co i ~mba Quintana (la Perricholi), Paco Porta (el Virrey Manuel de Amat), Carlos Rebolledo (Mar- tínez, secretario del Virrey), José Luis Romero (Arzobispo de Lima), Antonio Trujillo (li- cenciado don Tomás Esquivel) y Luis Vergiú (ayuda de cámara). (73) (4).-Y es lamentable que se perdiese una creación más de Mozart cuando, en 1778, por desacuerdos financieros con su tocayo el libretista vori Dalberg desistieran de colaborar en una Cora, monodrama destinado a estrenarse en Mannheim (7: p. 89; 82: p. 258). Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.9, 1953

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