Fénix 2, 353-363

E l eminenie escritor y erudito Rafael Hcliodoro Valle, stzs- tentó con motivo de su visita a Lima una interesante confe- rencia sobre "El Libro en M6xico". E n el local que ocupa provisionalmcnfc la Blbliofeca Nacional, y bajo los auspicios de la Enzbaiada de México, el distinguido hombre de letras y profcsor de la llniversidad de México desarrolló srt charla el día 27 de Marzo, anfe una numerosa concurrencia, e hizo entrega de la obra "Arte Precolombino de Méxrco y de la Amérrca Cenfrai". Para esta actrración circrilaron invitacio- nes especiales, constituyendo la ceremonia un aeonfecimienfo de grandes contornos en nuestros circrilos intelectuales. Dri- mos a continuación, en forma íntegra, la sugestiva charla con clue el ilustre investigador deleifó a su auditorio. Sr. Director de la Biblioteca Nacional, Señoras y Señores: Entre las obras imperecederas de México resplandece con brillo propio, en la biogra- fia de la cultura en América, la que el libro lleva a cabo, en medio de sus enemigos natu- rales, n.o sólo para deleite de quienes lo aman como fruto definitivo de la inteligencia y co- mo síntesis de muchas artes y oficios, sino para estíniulo del hombre que ansia sacudir el yugo de la servidumbre y unirse al coro de los que, trabajando con alegría, disfrutan su par- te alícuota de felicidad en el reino de la tierra. Hay dos países de América que actualmente compiten en la producción de librmos: Méxi- co y Argentina, situados en los confines de nuestro mundo de habla española en que se siente el pulso arteria1 de las nuevas inquietudes que están cambiando el curso de la. histo- ria. E s en el Perú -la tieira en que Antonio Ricardo, un maestro venido de Mexico, im- primió el primer 1ibr.u- en donde el viajero puede medir el ritmo de los libros que vie- nen y van, cumpliendo ,su tarea de bien entre quienes lo consideran como uno de los instru- mentos más eficaces para elaborar cultiira y como la más viril obra de arte que cmcrge de las manos y del entendimiento del hombre. Una simple indagación permite deducir que el libro argentino invade más el merca- do de México; y que el mexicano se preocupa más por el contenido en que resuenan las doctrinas renovadoras y las últimas e~ucubracionesdel arte; y si aquel está mejor distri- buido, en este los niaestros de la tipografia aguzan ingenio y saber heredados al través de cuatro siglos desde que Juan Paoli en 1539 dio a la estampa el primer libro formal en América. Otra distinción en este paralelo puede señalar que mientras en Argentina se pu- blican más libvos de carácter americano (el más reciente de ellos la celebérrima crónica de Fernández de Oviedo y Valdés) en México los editores se hallan más seducidos por lo Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.2, enero-junio 1945