Aproximaciones a la obra teatral de Nicomedes Santa Cruz
Aparicio desde la Biblioteca Nacional del Perú
Fénix. Revista de la Biblioteca Nacional del Perú, N°49, 2021
Las referencias sobre su vida en Estados Unidos son escuetas. Se sabe que el peque-
ño dominó el idioma inglés, quizá incluso mejor que el español; que se hizo lector
de Shakespeare; que oía a Wagner y que desarrolló un especial gusto por la ópera y el
teatro. Empezó su producción literaria a su regreso a Lima hacia inicios del siglo XX
(Feldman, 2006, 54).
En su Historia de la República, Jorge Basadre (2010) menciona el estreno de dos obras
teatrales de don Nicomedes Confort del hogar (1908) y Servicio obligatorio (1909), obra
esta última por la cual ganó el concurso teatral por Fiestas Patrias de 1909 (Basadre,
2010). Sabemos que la puesta en escena se realizó como parte de una campaña de la
Municipalidad de Lima, en ese momento el alcalde era Guillermo Billinghurst, quien
se caracterizó por desarrollar una gestión que tuvo como pilares la higiene, el desarro-
llo de obras públicas y una moral «restrictiva», dentro de la cual buscó erradicar las
llamadas comedias pícaras que pudieran atentar contra las buenas costumbres (Gonza-
les y González, 2005, 19-20). Esta gestión municipal promovió, entonces, obras de un
humor más proclive a conservar y generar lo que el redactor que comenta las puestas
en escena para la revista Variedades, describe al hablar de Servicio obligatorio, en 1909
como: «la moral social» (21 de agosto de 1909, 600).
Gracias a las notas sobre él publicadas en Variedades, sabemos que sus puestas en
escena se hicieron en el teatro Olimpo. Este era un teatro de dimensiones menores
que sus contemporáneos como el Politeama. Fue el preferido para el teatro por tandas,
y se había destinado al género chico, compuesto de zarzuelas y revistas (Bischoffshau-
sen, 2018, 33)
5
.
«Excepcionales condiciones para el arte dramático»
En mayo de 1908, la revista Variedades calificaba a don Nicomedes Santa Cruz Apari-
cio como un autor con excepcionales condiciones para el arte dramático. La cita cobra
más relevancia cuando recordamos que se publicó en la revista dirigida por un muy
crítico Clemente Palma, hombre proclive al desdén literario y al apóstrofe racial
6
. La
favorable reseña, con motivo del estreno de la obra Confort del hogar, señala:
5
Este teatro existió hasta 1912, año en que tuvo un trágico desenlace, pues «cedieron las barandas de la
galería alta y las personas que estaban apostadas viendo el espectáculo de turno cayeron, con lo cual el
cierre del teatro se hizo inminente» (Rengifo, 2021, 49). En su emplazamiento se construyó el famoso
teatro Forero, que daría paso al teatro Municipal (Bischoffshausen, 2018, 33).
6 Es famoso el desdén literario con que Clemente Palma comentó el poema de un joven César Vallejo.
En Variedades del 22 de setiembre de 1917, a través de su columna «Correo Franco», le escribía al autor
de los Heraldos negros: «Nos remite usted un soneto titulado “El poeta a su amada” que en verdad lo
acredita a usted para el acordeón o para la ocarina antes que para la poesía. Sus versos son burradas
más o menos infectas y que hasta el momento de largar al canasto su mamarracho no tenemos de
usted otra idea sino la de deshonra de la colectividad trujillana, y que si descubrieran su nombre el
vecindario haría lazo y lo amarraría en calidad de durmiente en la línea del ferrocarril de Malabrigo»
(Variedades, 22 de septiembre de 1917, 1011). Una rápida revisión de la revista permite, además, ver las
descripciones que en esos mismos números se hacen sobre los boxeadores afrodescendientes, para con-
textualizar la impresión que el refinamiento y talento de don Nicomedes debió inspirar en la revista.