Fénix 16, 5-40

Servicio de Extensión de Lima CARMEN CHECA DE SILVA A qué llamamos Servicio de Extensión de Lima? En realidad todo el Departamento de Fomento de Bibliotecas Públicas Municipales realiza un servi– cio de extensión bibliotecaria pero nuestro Presupuesto permite sólo ayudas y no mantenimiento de Biblioteca alguna de provincia o distrito. En cambio en el Departamento de Lima, más exactamente dentro de la Gran Lima tenemos un sistema de ocho bibliotecas pequeñas o agencias de extensión y un bibliobús que, conectados con la Central de la Biblioteca Nacional funcionan a ritmo de la técnica moderna. Como hemos visto en la historia de este Departamento, dicho Sistema fue creado y organizado con fondos producto de la Ley 10847 y así continúa dentro del Presupuesto. Por lo tanto el Departamento tiene el mayor cuidado de que este Sistema funcione actualizado y constantemente renovado para servir de mo– delo a bibliotecas con iguales problemas en el resto de la República. Las ocho pequeñas bibliotecas o Estaciones están situadas en zonas popu– losas de intenso movimiento en donde la mayoría de la población juvenil pugna por superarse adquiriendo la preparación necesaria p~ra ingresar a la Universidad. Dado el escaso número de vacantes y el bajo nivel cultural de los educandos resta a las bibliotecas públicas asumir la tarea de proveer del material biblio– gráfico necesario, preparar monografías, ofrecer ayudas audovisuales y agotar to– dos los recursos que faciliten el éxito de los lectores. Es un orgullo para los bibliotecarios el contribuir a resolver problemas individuales y el comprobar có– mo después de lecturas esforzadas acuden satisfechos a comunicar sus triunfos. En los distritos de Lima tiene la Biblioteca Nacional cuatro Estaciones. De ellas dos se encuentran en el tradicional Rímac, una en el Parque Cánepa de La Victoria y la última en Breña. En las zonas marginales tiene otras cuatro: El Agustino, Comas, San Martín de Porras y Villa María del Perpétuo Socorro. La colección de las Estaciones es más numerosa que la de las Mínimas como SI."· les dice a aquellas de las zonas marginales desde su inauguración en el año 1958 y 1960. Tienen todas las cuatro algo más de 3,500 obras. En cambio en las más pequeñas no se llega a 1,500. Para el lector de estas líneas han de parecer sin duda muy pobres estas cifras y hasta sentirá la tentación de olvidar que se les haya llamado Bibliotecas en algún momento; pero, si considera que Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.16, 1966