Fénix 22, 162-167

La Instrucción Primaria en el Perú Virreinal RUBEN VARCAS UCARTE, S. J. Aunque el Gobierno Virreinal y, sobre todo, la Iglesia, como puede verse en los Concilios Limenses, se ocuparon de la educación del indígena y trataron de que en los pueblos hubiese escuelas en donde se enseñase a los niños y niñas las primeras letras, hay que reconocer que esto no se consiguió sino después de muchos años. La dificultad nacía de la escasez de preceptores o maestros y tamo bién de la dispersión del habitante de las serranías. En la costa se hacía más fácil la tarea, por uno y otro capítulo y de ahí que entre los costeños desapareció pronto la lengua aborigen para dar lugar al castellano que todos hablaban. Por una carta de un cura de Arequipa al Sr. Obispo, en el siglo XVII, se colige la dificultad que había, para establecer escuelas de muchachos como de muchachas. Dice así: "En todos tiempos se a solicitado el establecimiento de las escuelas de muchachos, en muchos pueblos por su cortedad no se a podido conseguir por no aver persona que poner por preceptor. En los más prin– cipales continúa establecida, mas no de todos aquellos que pudieran concurrir de la feligresia, de que las más veces nos contentamos con la asistencia de la ter– cera o quarta parte de muchachos y esto es a costa de muchos enfados y bastante cuidado, porque cada uno necesita de un fiscal que lo reduzca a ella, mediante que sus padres más que su aprovechamiento y enseñanza estiman servirse de ellos, teniéndolos hechos zagales en la guarda de sus ganados. Para cuyo intento de noche los trasportan a sus estancias que distan muchas veces ocho, diez doce, catorce, y diez y seis leguas del pueblo. A que asimismo concurre el que aunque estos sostengan casa en el pueblo y que lo más están sin ella no la ocupan y como el modo de sustentarse es tan escaso no pueden mantener los hijos desviados ... " (1 ). A esta dificultad se añadía el que los bienes de comunidad no fueran sufi– cientes para pagar un maestro y, aunque por otros medios se subsanase esta falta, con todo venía a hacerse dificultoso el mantenimiento de las escuelas. Teniendo presentes estas dificultades, no es extraño que muchos se contentaran con aprender 1. Colección Vargas. Manuscritos. Tomo 18. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.22, 1972